En un operativo conjunto que sacudió la tranquila localidad de Ocotitlán, municipio de Ixhuatlán del Café, Veracruz, tres individuos fueron aprehendidos por las autoridades estatales y federales bajo la sospecha de comercializar combustible ilegalmente. El sorpresivo cateo, llevado a cabo en un inmueble de la zona, destapó una presunta red de venta clandestina de gasolina, revelando un escenario que va más allá del simple comercio ilícito.

La Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGE) informó que los detenidos, identificados como Edgar “N”, Antonio “N” y Marco Antonio “N”, fueron sorprendidos in fraganti en el interior de la propiedad. Las evidencias encontradas en el lugar pintan un cuadro complejo: no solo se hallaron vehículos, embudos con mangueras, botellas con líquido y una cartulina que exhibía un tabulador de precios de la supuesta gasolina, sino también un letrero que anunciaba la venta del combustible, confirmando la naturaleza comercial de la operación.

El hallazgo más preocupante, sin embargo, fue el descubrimiento de una sustancia blanca granulada con características similares al cristal, lo que sugiere la posible implicación de los detenidos en actividades relacionadas con el narcotráfico. Este descubrimiento amplía significativamente el alcance de la investigación y plantea interrogantes sobre la conexión entre el tráfico de combustible y el mercado de drogas en la región.

Además de la sustancia presuntamente ilícita, las autoridades confiscaron una serie de bidones, botellas y galones de diferentes capacidades, todos conteniendo un líquido con la apariencia de gasolina. Una bomba acoplada a una manguera verde, también encontrada en el inmueble, refuerza la hipótesis de una operación de venta de combustible a gran escala.

La FGE ha asegurado que los detenidos fueron tratados con pleno respeto a sus derechos humanos y al debido proceso. Tras su captura, Edgar “N”, Antonio “N” y Marco Antonio “N” fueron puestos a disposición del fiscal correspondiente de la Fiscalía Regional Córdoba, quien determinará su situación jurídica en los próximos días. La investigación continúa abierta y las autoridades no descartan la posibilidad de realizar más detenciones en relación con este caso.

Este operativo representa un golpe significativo contra la venta ilegal de combustible en la región. Se espera que la investigación arroje luz sobre la magnitud de esta operación y sus posibles vínculos con otras actividades delictivas. La comunidad de Ocotitlán, por su parte, observa con atención el desarrollo de los acontecimientos, con la esperanza de que este caso sirva como precedente para combatir la inseguridad y la ilegalidad en su territorio. La pregunta que queda en el aire es: ¿qué ramificaciones tendrá este descubrimiento en el entramado delictivo de la zona? Las autoridades se mantienen vigilantes y prometen seguir trabajando para desmantelar las redes criminales que operan en el estado de Veracruz.