La tarde del 24 de junio quedará grabada en la memoria de los habitantes de Ecatepec de Morelos como una jornada marcada por la imprudencia y sus dramáticas consecuencias. Un video, que rápidamente se viralizó en redes sociales, muestra el escalofriante momento en que una camioneta sale proyectada por los aires tras impactar con un vehículo particular dentro del carril confinado del Mexibús Línea 1, a la altura de la estación Cuauhtémoc Sur. La violencia del choque fue tal que la camioneta derribó un poste y causó daños a varios negocios locales, dejando una estela de destrucción a su paso. Mientras la imagen de la camioneta volando se repetía una y otra vez en las pantallas, la pregunta resonaba en la mente de todos: ¿cómo pudo suceder algo así?

Según las primeras versiones, el vehículo particular que provocó el accidente se dio a la fuga, abandonando al conductor de la camioneta a su suerte. Afortunadamente, y casi de milagro, el conductor resultó ileso, un hecho que muchos atribuyen a la pura fortuna. Testigos presenciales, aún conmocionados por la escena, contactaron de inmediato a las autoridades para reportar lo sucedido y exigir que se deslinden responsabilidades. La indignación crecía a medida que se difundían las imágenes del accidente, y la exigencia de justicia se hacía cada vez más fuerte. ¿Quién era el responsable de esta imprudencia? ¿Se haría cargo de los daños materiales y el susto que provocó a tantos?

El Sistema de Transporte Masivo Mexibús, a través de un comunicado emitido la noche del martes, informó sobre los retrasos en el servicio ocasionados por el choque. El llamado a la precaución se extendía a todos los automovilistas, recordándoles la importancia del respeto a las normas de tránsito y la responsabilidad que conlleva conducir un vehículo. Sin embargo, el caos en el transporte público de Ecatepec no terminaría ahí.

Casi como una macabra coincidencia, un segundo percance se registró esa misma noche en el carril del Mexibús. Esta vez, una de las unidades del sistema chocó contra el muro de contención en el tramo elevado de la carretera México-Pachuca, a la altura de la icónica escultura "El Vigilante". Pasajeros atrapados dentro de la unidad, la incertidumbre y el miedo se apoderaron de la escena. Servicios de emergencia y paramédicos acudieron al lugar para atender a los usuarios, algunos de los cuales presentaron lesiones menores. El accidente en la Línea 4 del Mexibús se sumaba a la lista de incidentes que pusieron a prueba la paciencia y la resiliencia de los usuarios del transporte público.

Estos dos incidentes, ocurridos en un lapso de pocas horas, abren un debate sobre la seguridad en el transporte público y la necesidad de reforzar las medidas para prevenir accidentes. La imprudencia al volante, la falta de mantenimiento de las unidades y la necesidad de una mayor vigilancia en las vialidades son algunos de los temas que exigen una pronta atención por parte de las autoridades. Mientras tanto, la comunidad de Ecatepec se pregunta: ¿qué se necesita para que las calles sean más seguras? ¿cuántos accidentes más tendrán que ocurrir para que se tomen medidas contundentes? La respuesta, aún esquiva, se espera con urgencia.