La irrupción de nuevas estrellas defensivas en la NFL siempre inyecta una dosis de emoción y expectativa a la liga. La temporada pasada, vimos el ascenso meteórico de Jared Verse, el liniero de los Rams que se coronó como el mejor novato defensivo. Su impacto fue inmediato, presionando al quarterback en 77 ocasiones, con 4.5 capturas, dos balones sueltos forzados y recuperados, además de 66 tacleadas. Verse demostró que la defensa puede ser tan espectacular como el ataque, y que un solo jugador puede transformar la dinámica de un equipo. No olvidemos a los esquineros de los Eagles, Cooper DeJean y Quinyon Mitchell, piezas clave en su camino al campeonato. Este año, la pregunta es: ¿quiénes serán los nuevos rostros que dominarán el lado defensivo del balón?

Uno de los candidatos más prometedores es el explosivo liniero defensivo de los Giants, seleccionado con la tercera selección global. Su habilidad para penetrar la línea ofensiva, evidenciada en sus 12 capturas de quarterback, 24 tacleadas para pérdida de yardas y dos balones sueltos forzados en su último año universitario, lo convierte en una amenaza constante. Si bien compartirá la línea con estrellas como Brian Burns y Kayvon Thibodeaux, la posibilidad de ver a este trío infernal aterrorizando a los quarterbacks rivales es un sueño para la afición de los Giants, que anhela volver a los días de gloria. La anécdota de Carter buscando la bendición de Taylor Lawrence para usar el número 56, y el consejo del legendario linebacker de forjar su propio camino, añade un toque de nostalgia y respeto por la historia del equipo. Con un contrato de 4 años y 45 millones de dólares, Carter tiene la presión y la motivación para superar el récord de capturas de quarterback para un novato de los Giants (8). Las comparaciones con Aidan Hutchinson y Travon Walker, dos jóvenes defensivos de élite, son un indicativo del potencial de este jugador. Las casas de apuestas lo colocan como el favorito para el premio al mejor novato defensivo, ¿podrá cumplir con las expectativas?

Otro nombre a seguir es el del esquinero de los Cardinals, una joya que Arizona encontró en la segunda ronda del Draft. A pesar de las lesiones que limitaron su participación en su última temporada universitaria, Johnson demostró su capacidad para cambiar el rumbo de un partido con dos intercepciones devueltas para touchdown en tan solo seis encuentros. Sus 9 intercepciones y 19 pases defendidos en su carrera universitaria son testimonio de su instinto y habilidad para leer el juego. Si bien las dudas sobre sus rodillas persisten, un Johnson sano tiene el potencial de ser uno de los mejores esquineros de la liga, recordando a la leyenda de los Cardinals, Patrick Peterson. ¿Podrá mantenerse sano y dominar la secundaria?

Desde Michigan llega el imponente tacle defensivo de los Browns. Seleccionado quinto global, Graham es considerado el mejor prospecto en su posición, un jugador disruptivo contra la carrera que obligará a los equipos rivales a replantear sus estrategias ofensivas. Bajo la tutela del estratega defensivo Jim Schwartz, Graham no solo se limitará a detener la carrera, sino que también buscará presionar al quarterback, aprovechando la atención que genera su compañero Myles Garrett, dos veces nombrado mejor defensivo de la liga. La combinación de Garrett por fuera y Graham por dentro promete ser una pesadilla para las ofensivas rivales. ¿Podrá Graham revitalizar la defensa de los Browns y ayudarlos a regresar a la élite de la liga?

Finalmente, tenemos al versátil liniero defensivo de los Falcons. Su capacidad para jugar en múltiples posiciones lo convierte en un comodín invaluable para el coordinador defensivo Jeff Ulbrich. Su velocidad e intensidad le permiten penetrar la línea ofensiva desde diferentes ángulos, generando presión al quarterback y creando caos en el backfield rival. En situaciones de tercer down, su habilidad para leer la jugada y reaccionar rápidamente lo convierte en una amenaza tanto para el pase como para la carrera. Junto al también novato James Pearce, Walker forma parte de una joven y prometedora línea defensiva que busca revitalizar a unos Falcons que sufrieron en defensa la temporada pasada. ¿Podrá esta dupla de novatos impulsar la defensa de Atlanta y llevarlos a la contienda?

La temporada 2025 promete ser emocionante, con estos jóvenes talentos listos para dejar su huella en la NFL. Solo el tiempo dirá si logran alcanzar su potencial y se convierten en las nuevas estrellas defensivas de la liga.