
Inicio > Noticias > Entretenimiento
25 de junio de 2025 a las 23:25
El adiós de Trigo: un dolor en la dinastía Figueroa
El recuerdo de Trigo Figueroa, el primogénito de Joan Sebastian, permanece vivo en el corazón de su familia, especialmente en el de su hermano José Manuel, quien no deja pasar la oportunidad de honrar su memoria, sobre todo en fechas tan significativas como su cumpleaños. Un día como hoy, 25 de junio, Trigo hubiera cumplido 46 años. La ausencia pesa, y José Manuel lo expresa con una emotividad que conmueve a quienes conocen la historia de esta familia. "Se te extraña lo que no te imaginas", escribe en sus redes sociales, acompañando sus palabras con una fotografía que captura la esencia de su hermano mayor.
Más allá de la simple nostalgia, José Manuel comparte una profunda reflexión sobre el vacío que dejó la partida de Trigo, un vacío que, como predijo su padre, Joan Sebastian, se haría cada vez más palpable con el paso del tiempo. "Bien recuerdo las palabras de mi padre cuando me dijo con los ojos llenos de lágrimas que yo no sabía la falta que me harías en el futuro", confiesa José Manuel, recordando la premonición del "Poeta del Pueblo". Una premonición que, lamentablemente, se convirtió en una dolorosa realidad. "Qué razón tenía el viejo", añade con un dejo de tristeza y resignación.
La figura de Trigo no solo se limita al ámbito familiar. Su cercanía con Joan Sebastian trascendía lo personal, convirtiéndose en una pieza clave en la carrera del reconocido cantante. Trigo no era solo un hijo, era un confidente, un colaborador, el coordinador de seguridad y viajes de su padre. Su presencia era constante en las presentaciones de Joan Sebastian, acompañándolo en cada escenario, en cada viaje, en cada éxito.
Esa cercanía, sin embargo, también los expuso a la tragedia. El fatídico 27 de agosto de 2006, en Plaza del Valle, Hidalgo, Texas, la vida de Trigo se apagó de forma abrupta. La confusión y el caos reinaron tras la presentación de Joan Sebastian, cuando un fanático, en medio del tumulto, disparó contra Trigo. Las versiones sobre lo sucedido son diversas: algunos afirman que murió en los brazos de su padre, otros que falleció en el hospital tras un intento fallido de extraer la bala. Lo cierto es que la tragedia marcó para siempre a la familia Figueroa.
Años después, Joan Sebastian relataría con profundo dolor la impotencia que sintió aquella noche, la falta de apoyo de las autoridades, la agonía de su hijo en sus brazos mientras imploraba ayuda. Un relato desgarrador que quedó plasmado en la bioserie del cantautor, perpetuando el recuerdo de Trigo y la profunda herida que dejó su partida. Una herida que, a pesar del tiempo transcurrido, sigue latente en el corazón de quienes lo amaron. El legado de Trigo, más allá de la tragedia, se mantiene vivo en el recuerdo de su familia, en las anécdotas compartidas, en las fotografías que lo inmortalizan y en el amor incondicional que aún perdura.
Fuente: El Heraldo de México