La comunidad universitaria de Colima se encuentra de luto tras la trágica pérdida de tres jóvenes estudiantes en un accidente automovilístico ocurrido la madrugada del domingo. El júbilo y la celebración de la graduación del Bachillerato 12 de la Universidad de Colima se transformaron en dolor e incredulidad al conocerse la noticia del fatal desenlace en la carretera que conduce a El Chivato, en Villa de Álvarez. Nashla C., estudiante de la Facultad de Medicina, Christopher A. y Montserrat G., ambos de la Facultad de Mercadotecnia, vieron sus sueños y futuros truncados en un instante. Jóvenes llenos de vida, con apenas entre 18 y 20 años, que apenas comenzaban a trazar su camino en el mundo.

El Volkswagen Gol gris en el que viajaban se estrelló contra un árbol en la curva conocida como “Los Mangos”, un tramo de la carretera tristemente célebre por su peligrosidad. Las autoridades investigan las circunstancias exactas del accidente, considerando factores como la velocidad, el estado de la carretera y las condiciones del conductor. Si bien aún no se han emitido conclusiones definitivas, este trágico suceso reabre el debate sobre la seguridad vial, especialmente en carreteras con curvas pronunciadas como la que conduce a El Chivato. ¿Señalización adecuada? ¿Campañas de concienciación suficientes? Estas son preguntas que la comunidad se plantea en medio del dolor.

La madrugada, que debía ser de festejo y alegría, se convirtió en una pesadilla. Alrededor de las 2:00 a.m., tras el baile de graduación, el vehículo en el que viajaban los cinco jóvenes perdió el control. Mientras los dos ocupantes de los asientos delanteros, incluido el conductor, sufrieron lesiones menores y fueron trasladados a hospitales cercanos, Nashla, Christopher y Montserrat, quienes viajaban en la parte trasera, perdieron la vida en el acto. La rápida respuesta de los paramédicos de la Cruz Roja y del personal de Protección Civil no pudo, lamentablemente, evitar la tragedia.

El impacto de esta pérdida se siente profundamente en toda la comunidad universitaria. El rector Christian Torres Ortiz Zermeño, a través de emotivas esquelas publicadas en redes sociales, expresó sus condolencias y solidaridad con las familias, amigos y compañeros de los fallecidos. La Federación de Estudiantes Colimenses también se unió al duelo, manifestando su pesar y enviando un mensaje de fortaleza a los seres queridos de las víctimas.

Este lamentable accidente nos recuerda la fragilidad de la vida y la importancia de la prudencia al volante. Más allá de las investigaciones y las posibles responsabilidades, queda el profundo vacío dejado por la ausencia de estos tres jóvenes, sus sueños truncados y el dolor inconsolable de sus familias. Que este trágico suceso sirva como un llamado a la reflexión y a la acción para fortalecer la seguridad vial y prevenir futuras tragedias que enluten a nuestra comunidad. La Universidad de Colima y toda la sociedad colimense lloran la partida de Nashla, Christopher y Montserrat, tres jóvenes cuyas vidas fueron segadas demasiado pronto. Su memoria permanecerá viva en el corazón de quienes los conocieron y amaron.