
24 de junio de 2025 a las 11:10
Servicios: Motor de la economía
La economía mexicana nos ha dado una sorpresa en abril, retomando el aliento tras un ligero traspié en marzo. El motor de este renovado impulso ha sido el sector servicios, demostrando una vez más su resiliencia y capacidad para dinamizar el panorama nacional. Con un crecimiento mensual del 0.91%, el sector terciario registra su mejor desempeño desde abril de 2023, inyectando optimismo y abriendo la puerta a nuevas oportunidades. Este repunte, según los expertos, se debe en gran medida a la fortaleza mostrada por el consumo interno, reflejada en las impresionantes cifras de ventas de la ANTAD durante mayo. Imaginen el impacto de un 10.3% de crecimiento anual en las ventas de autoservicios y departamentales: familias realizando sus compras, negocios abasteciéndose, un flujo constante de actividad que se traduce en prosperidad para miles de mexicanos.
Sin embargo, no todo es color de rosa. Si bien el presente nos sonríe, el futuro se presenta con matices. La posibilidad de una baja en la tasa de interés por parte de Banco de México, aunque positiva en el corto plazo, no es una garantía de crecimiento sostenido. La economía global, como un mar embravecido, puede azotar con fuerza a nuestro país, especialmente dada nuestra alta dependencia del comercio internacional. Factores externos, como la volatilidad de los mercados o la incertidumbre geopolítica, pueden generar turbulencias que impacten directamente en nuestro desempeño económico.
Además, debemos ser conscientes de las debilidades internas que persisten. El consumo privado, aunque animado por el impulso de los servicios, aún no alcanza la solidez que necesitamos. La inversión, pilar fundamental para el crecimiento a largo plazo, muestra signos de timidez, lo que limita nuestro potencial de desarrollo. A esto se suma la expectativa de una consolidación fiscal en 2025, una medida necesaria para la estabilidad económica, pero que podría frenar el dinamismo en el corto plazo. Incluso, algunos analistas plantean la posibilidad de una contracción de la actividad económica para el próximo año, un escenario que, si bien no es deseable, debemos considerar para estar preparados.
La desaceleración económica que hemos experimentado desde finales de 2023, aunque mitigada por el reciente repunte, nos recuerda la importancia de mantenernos alerta y trabajar en estrategias que fortalezcan nuestra economía. La pérdida de fuerza en el mercado laboral, unida a la debilidad de la inversión, son factores que podrían afectar el desempeño del sector servicios en los próximos meses. Ante este panorama, la pregunta clave es: ¿cómo podemos asegurar un crecimiento sostenido y resiliente que nos permita sortear las adversidades y construir un futuro próspero? La respuesta, sin duda, reside en la colaboración entre el sector público, el sector privado y la sociedad civil, trabajando juntos para impulsar la innovación, fortalecer el mercado interno y diversificar nuestra economía. El camino no es fácil, pero con visión, determinación y trabajo en equipo, podemos alcanzar nuestras metas y construir un México más próspero para todos.
Fuente: El Heraldo de México