La lucha contra el crimen organizado en México continúa dando resultados palpables. En la reciente conferencia matutina, el Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, detalló los importantes avances logrados en la Estrategia Nacional de Seguridad. Las cifras hablan por sí solas: 1,233 detenidos por delitos de alto impacto, incluyendo 22 objetivos prioritarios, un duro golpe a las estructuras criminales. El decomiso de 671 armas de fuego, 200 de ellas en un operativo en Culiacán, Sinaloa, desarma a la delincuencia y limita su capacidad operativa. Además, se incautaron cerca de ocho toneladas de drogas, desmantelando 48 laboratorios clandestinos y áreas de concentración. Estas acciones no solo representan una pérdida millonaria para el crimen organizado, sino que también evitan que millones de dosis de droga lleguen a las calles, protegiendo a nuestra juventud y a la sociedad en general. La recuperación de más de un millón 800 mil litros de combustible es otro logro significativo, combatiendo el robo y el mercado negro de hidrocarburos.

El trabajo coordinado entre la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina, la Guardia Nacional, la Fiscalía General de la República y la Secretaría de Seguridad ha sido fundamental para estos resultados. La detención de Irwin “N”, jefe operativo y logístico de un importante cártel, relacionado con el homicidio de un agente de seguridad, demuestra la eficacia de la inteligencia y la cooperación interinstitucional. La captura de Walter “N”, buscado en Estados Unidos por homicidio, reafirma el compromiso de México con la justicia internacional. Asimismo, la detención de 10 integrantes del grupo delictivo “Pueblos Unidos”, incluyendo a uno de sus principales operadores, contribuye a la pacificación de Tabasco.

La "Operación Frontera Norte" también ha dado frutos importantes. La detención de Pablo Edwin “N”, alias “Flaquito”, generador de violencia y dedicado a la producción y tráfico de drogas hacia Estados Unidos, es un paso crucial en la lucha contra el narcotráfico transfronterizo. El descubrimiento de un túnel de 600 metros de longitud utilizado para el trasiego de drogas, así como la incautación de 742 kilos de metanfetamina y 110 mil pastillas de fentanilo, evidencian la sofisticación de las operaciones criminales y la determinación de las autoridades para combatirlas. El aseguramiento de un arsenal de 200 armas, incluyendo ametralladoras, lanzacohetes y lanzagranadas, en Culiacán, Sinaloa, así como el descubrimiento de un complejo sistema de túneles subterráneos, desmantela una importante base de operaciones del crimen organizado.

Estos resultados son un claro testimonio del compromiso del gobierno con la seguridad de todos los mexicanos. La lucha contra el crimen organizado es una tarea compleja y de largo plazo, pero los avances logrados nos demuestran que vamos por el camino correcto. La coordinación, la inteligencia y la perseverancia son las claves para construir un México más seguro y pacífico. La ciudadanía puede estar segura de que las autoridades no descansarán hasta lograr este objetivo. El trabajo continúa, y la esperanza de un futuro mejor se fortalece con cada golpe que se asesta a la delincuencia. La seguridad es una tarea de todos, y la colaboración entre sociedad y gobierno es esencial para alcanzar la paz que anhelamos.