
25 de junio de 2025 a las 00:30
El Viceroy negocia ¿juicio o libertad?
La sombra de la incertidumbre se alarga sobre el caso de Vicente Carrillo Fuentes, alias "El Viceroy", mientras el reloj judicial le concede 90 días más para negociar su destino. Un cuarto de año que se antoja crucial para el exlíder del Cártel de Juárez, quien se encuentra en la cuerda floja ante la posibilidad de un juicio que podría culminar con la pena capital. La tensión se palpa en el aire, cada minuto que pasa acerca a Carrillo Fuentes a un futuro incierto, mientras los fiscales estadounidenses y su defensa libran una batalla silenciosa en los despachos.
Este nuevo plazo, concedido por la jueza federal Joan Azrack en una breve pero trascendental audiencia en la Corte de Brooklyn, abre un abanico de especulaciones. ¿Qué se esconde tras esta prórroga? ¿Se avecina un acuerdo que permita a Carrillo Fuentes eludir la pena de muerte? ¿O se trata de una simple maniobra estratégica para ganar tiempo? Las preguntas se acumulan en la mente de quienes siguen de cerca este caso, que ha acaparado la atención de la opinión pública a ambos lados de la frontera.
La figura de "El Viceroy" evoca una época oscura en la historia del narcotráfico en México. Su nombre resuena con el eco de violentos enfrentamientos, tráfico de drogas a gran escala y una lucha encarnizada por el control del territorio. Ahora, lejos de los dominios que alguna vez controló, Carrillo Fuentes se enfrenta a la justicia estadounidense, un sistema implacable que no duda en aplicar la pena máxima.
Estos 90 días se presentan como un tablero de ajedrez donde cada movimiento es crucial. Los fiscales, con la solidez de las pruebas en su mano, buscan un castigo ejemplar que sirva como advertencia para otros capos de la droga. Por otro lado, la defensa de Carrillo Fuentes se aferra a la esperanza de un acuerdo que le permita salvar la vida a su cliente, explorando las grietas del sistema en busca de una salida.
La noticia, revelada por el periodista especializado Arturo Angel, ha corrido como la pólvora, generando un intenso debate en los medios de comunicación y las redes sociales. Expertos en derecho analizan las posibles implicaciones de este nuevo plazo, mientras la sociedad se divide entre quienes claman por justicia y aquellos que se oponen a la pena de muerte.
El futuro de Vicente Carrillo Fuentes pende de un hilo. En los próximos 90 días se definirá si enfrentará un juicio que podría condenarlo a muerte o si logrará un acuerdo que le permita eludir el peor de los escenarios. Mientras tanto, la tensión continúa en aumento, y el mundo observa con atención el desenlace de este caso que pone en relieve la complejidad de la lucha contra el narcotráfico. La cuenta regresiva ha comenzado.
Fuente: El Heraldo de México