
24 de junio de 2025 a las 00:25
¿Huracán en camino? 60% de probabilidad
La cuenca del Atlántico se encuentra bajo la atenta mirada de meteorólogos y autoridades, ante la formación de una nueva zona de baja presión con un 60% de probabilidad de desarrollo ciclónico en las próximas 48 horas. Esta situación, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), requiere un seguimiento minucioso debido a la velocidad con la que se desplaza, entre 16 y 24 kilómetros por hora, en dirección a las costas de Quintana Roo, ubicándose actualmente a 3,520 kilómetros al este-noreste del estado.
Aunque por el momento no representa un peligro inminente para territorio mexicano, la posibilidad de que evolucione a tormenta o depresión tropical en los próximos días, e incluso alcance la categoría de huracán para el 30 de junio, mantiene en alerta a la población. Es importante destacar la imprevisibilidad de estos fenómenos, ya que su trayectoria puede cambiar repentinamente, modificando el nivel de riesgo para las zonas costeras. El SMN y Conagua continuarán monitoreando constantemente su evolución, informando oportunamente a la ciudadanía sobre cualquier cambio significativo en su intensidad o dirección.
Esta situación en el Atlántico se suma a la vigilancia que Conagua mantiene sobre otra zona de baja presión en el Pacífico, con un 80% de probabilidad de convertirse en ciclón, que de conformarse, recibiría el nombre de Flossie, convirtiéndose en el quinto fenómeno de la temporada de huracanes 2025 en tocar tierra. Esta actividad simultánea en ambas cuencas oceánicas subraya la importancia de la preparación y la prevención ante la temporada de huracanes.
En el Pacífico, la temporada ha sido particularmente activa, con la formación de dos huracanes hasta el momento, de un total de cinco sistemas con potencial ciclónico que se han presentado. El huracán Érick, el más reciente, alcanzó la categoría 4 impactando las costas de Guerrero y Chiapas, dejando a su paso fuertes lluvias y vientos. Este evento nos recuerda la fuerza destructiva de estos fenómenos naturales y la necesidad de estar preparados.
A partir del 1 de julio se espera la formación de nuevos sistemas en el Atlántico. Si bien aún no se tienen nombres confirmados, las autoridades meteorológicas se mantienen atentas a su desarrollo. Es crucial que la población se mantenga informada a través de los canales oficiales y siga las recomendaciones de protección civil para minimizar los riesgos asociados a estos eventos. La prevención es clave para salvaguardar vidas y bienes ante la potencial amenaza de huracanes. Se recomienda a la población estar al tanto de los comunicados oficiales, tener un plan de emergencia familiar, y preparar un kit de suministros básicos en caso de ser necesario evacuar.
Fuente: El Heraldo de México